La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (Ocha) denunció que el régimen del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ordenó impedir el paso y entrega de ayuda humanitaria al norte de la Franja de Gaza durante el transcurso del último mes.
En un comunicado difundido este martes, el organismo expuso que “todos los intentos de la ONU de acceder a las zonas asediadas del norte de Gaza con alimentos y suministros de salud este mes fueron denegados o impedidos”.
Ocha recordó que este 12 de noviembre se está cumpliendo el plazo dado por el principal sostén de Israel, Estados Unidos, para que mejore la entrada de ayuda humanitaria al enclave, pero a pesar de ello el régimen sionista “no ha cumplido con las demandas de su aliado, con un enorme costo humano para los civiles palestinos”.
El ente añadió que en octubre ingresó la cantidad más baja de auxilios en este año y subrayó que de 19 solicitudes presentadas para entregar ayuda humanitaria en noviembre, “16 fueron denegadas por las autoridades israelíes o no pudieron llegar a las personas que necesitaban urgentemente asistencia humanitaria”.
Por otra parte, Louise Wateridge, trabajadora humanitaria de la ONU, alertó que más de medio millón de gazatíes se encuentran desplazados en zonas susceptibles de inundaciones con la próxima llegada del invierno y las lluvias, principalmente los que no tienen donde refugiarse y padecen hambre.
Recrudece el bombardeo y los desplazamientos
En medio de la ofensiva israelí contra la población palestina, 10 palestinos perdieron la vida este martes y decenas de familias fueron desplazadas en una nueva jornada de violentas y constantes agresiones israelíes contra la Franja de Gaza.
Fuentes médicas del enclave indicaron que un dron israelí bombardeó a un grupo de civiles en la ciudad de Deir al-Balah, en el centro la Franja de Gaza, lo que dejó al menos seis muertos y decenas de heridos.
Los paramédicos de la Media Luna Roja Palestina informaron que las víctimas fueron trasladados al Hospital de Mártires de Al-Aqsa en Deir Al-Balah después del ataque que apuntó contra personas reunidas cerca de una clínica en la calle Al-Bahr.
Un bombardeo similar mató a un palestino e hirió a unos 20 que fueron trasladados al Hospital Al-Shifa, al oeste de la ciudad de Gaza.
Por otro lado, el ejército israelí obligó a cientos de palestinos a desplazarse por la fuerza desde los centros de refugio y una zona residencial en la ciudad de Beit Hanoun.
Fuentes locales precisaron que 130 familias que estaban albergadas en centros de refugio y casas circundantes fueron forzadas a salir bajo intentos bombardeos.
