
El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, ordenó el viernes la disolución del Parlamento y convocó elecciones anticipadas para el 23 de febrero tras el colapso de la coalición gobernante del canciller, Olaf Scholz, alegando que era la única manera de dar al país un ejecutivo estable capaz de abordar sus problemas, reseñan agencias.
Scholz perdió un voto de confianza el 16 de diciembre y lidera un gobierno en minoría después de que su impopular y notoriamente conflictiva coalición tripartita colapsó el 6 de noviembre tras el cese de su ministro de Finanzas en una disputa sobre cómo revitalizar la estancada economía nacional.
Steinmeier dijo que tomó la decisión porque, tras consultar con los líderes de los partidos, estaba claro que no habría un acuerdo entre las formaciones para cerrar una mayoría para un nuevo gobierno en el parlamento actual.
Es precisamente en tiempos difíciles como estos en los que la estabilidad requiere un gobierno capaz de actuar y una mayoría fiable en el parlamento”, señaló al hacer el anuncio en Berlín.
“Por lo tanto, estoy convencido de que para el bien de nuestro país las nuevas elecciones son el camino correcto”, añadió.
La propuesta de disolver el parlamento fue enviada a Steinmeier por el canciller Scholz después de que el 16 de diciembre los diputados del Bundestag de Alemania votaran mayoritariamente a favor de retirar la confianza al Gobierno de Scholz.
Así, 394 de los 717 diputados presentes votaron en contra de la petición de confianza para Scholz como canciller de la República Federal de Alemania, mientras que 207 votaron a favor y 116 se abstuvieron.